El jefe comunal ofició al delegado presidencial exigiendo medidas concretas para agilizar el tránsito entre Chile y Argentina.
El alcalde de Punta Arenas, Claudio Radonich, envió un oficio al delegado presidencial regional, José Ruiz, solicitando la implementación de medidas urgentes que permitan agilizar el cruce fronterizo de Monte Aymond, uno de los pasos internacionales más transitados del país y punto clave en la relación entre las regiones de Magallanes y Santa Cruz.
La gestión se enmarca en el acuerdo alcanzado recientemente entre el alcalde Radonich, el Intendente de Río Gallegos, el Concejo Municipal de Punta Arenas y el Concejo Deliberante de la capital santacruceña, quienes manifestaron su preocupación por las largas esperas que deben enfrentar los viajeros en ambos lados de la frontera, tanto chilenos como argentinos. Según Radonich, los tiempos de espera pueden superar las tres o cuatro horas, situación que afecta negativamente la integración y el turismo binacional.
"Como es de conocimiento público, hemos tenido un aumento importante de visitas de argentinos a nuestra ciudad, y también de chilenos hacia Gallegos. Sin embargo, el cruce de Monte Aymond, que es el cuarto más transitado del país, aún no recupera su funcionamiento previo a la pandemia", afirmó el jefe comunal.
En su oficio, Radonich plantea la necesidad de establecer un sistema simplificado de control fronterizo, con un solo trámite de entrada y uno de salida por cada lado, a fin de reducir los tiempos de espera y facilitar el flujo de personas y vehículos. La propuesta requiere coordinación binacional y decisiones políticas a nivel central, ya que no es competencia directa del municipio ni del gobierno regional.
"Si queremos integración real, que no se quede solo en declaraciones, debemos avanzar en hechos concretos. Esto beneficia tanto a los chilenos como a los argentinos, y especialmente a nuestras economías locales", enfatizó el edil, quien llamó al delegado presidencial a tomar cartas en el asunto.
Finalmente, la autoridad local destacó la oportunidad que ofrece la temporada invernal, con múltiples actividades masivas organizadas tanto en Punta Arenas como en Río Gallegos, para impulsar el intercambio turístico y comercial entre ambas ciudades, siempre que las condiciones fronterizas así lo permitan.