En Antofagasta, solo el 42,4% de los pacientes con hipertensión arterial atendidos en la atención primaria y afiliados a Fonasa mantienen sus controles al día, una cifra alarmante que refleja la situación nacional: un tercio de los chilenos padece esta enfermedad, pero pocos siguen su tratamiento de forma adecuada.
Ante este escenario, el seremi de Salud, Alberto Godoy, llamó a la población adulta y adulta mayor a realizarse anualmente los exámenes preventivos EMPA y EMPAM. Estos chequeos permiten detectar precozmente la hipertensión y comenzar un tratamiento oportuno, evitando complicaciones graves como accidentes cerebrovasculares, enfermedades cardíacas e insuficiencia cardiaca.
El cardiólogo Jorge Mandiola, del Hospital Regional, también advirtió sobre la importancia del diagnóstico temprano. Sugiere medir la presión arterial una vez al año a partir de los 40 años, y cada tres años antes de esa edad. Según el especialista, los grupos más vulnerables son quienes llevan una vida sedentaria, consumen mucha sal y presentan enfermedades como obesidad, diabetes o insuficiencia renal crónica.
Para reducir los riesgos, Mandiola recomienda mantener una vida activa, con ejercicios regulares, y adoptar una alimentación saludable baja en sodio y rica en frutas, verduras, proteínas y granos integrales. También es fundamental evitar el tabaco y moderar el consumo de alcohol, medidas clave tanto para prevenir como para controlar la hipertensión.