Cáncer de Riñón: Tipos y factores de riesgo
El cáncer renal se produce, en la mayoría de los casos, por el crecimiento descontrolado de células de la corteza renal. El carcinoma de células renales llamado de “células claras” es el tipo más común de cáncer renal en personas adultas (75%); aproximadamente 25% de las personas con cáncer renal se presentan con enfermedad metastásica al diagnóstico.
El cáncer renal es dos veces más frecuente en hombres que en mujeres. Según la American Cancer Society 2014, la mayoría de las personas con cáncer renal son de edad avanzada, en promedio 64 años, siendo muy poco común en personas menores de 45 años.
Tipos
Existen varios tipos histológicos de cánceres renales siendo los más comunes:
- De células
- Cromófobo.
- Papilar
Otros tipos de cáncer de riñón incluyen:
- Carcinoma de células transicionales.
- Tumor de Wilms (variedad más frecuente en niños).
- Sarcoma renal.
Factores de riesgo
El cáncer de células renales se presenta frecuentemente en personas sin antecedentes familiares y rara vez forma parte de un síndrome hereditario.
Los principales factores de riesgo para esta enfermedad son:
- Hábito tabáquico.
- Exposición a ciertos productos químicos (cadmio, asbesto y petróleo).
- Personas sometidas a diálisis crónica.
- Uso indiscriminado de analgésicos (Aspirina y fenacetina).
- Sexo, los hombres tienen de 2 a 3 veces más probabilidades de padecerlo que las la mujeres.
- Edad, suele diagnosticarse entre los 50 y 70 años.
- Hipertensión arterial.
Factores genéticos
Pueden tener un componente hereditario pacientes con un familiar de primer grado diagnosticado de cáncer renal antes de los 40 años y pacientes que presentan cáncer bilateral o multifocal en un mismo riñón; dentro de los síndromes de predisposición hereditaria a cáncer que se asocian a cáncer renal se encuentran el Síndrome de Von Hippel Lindau, el Cáncer renal papilar hereditario, y otros (1).
Diagnóstico situacional: cifras nacionales oficiales
En Chile al año 2020 se estiman 2168 nuevos casos al año de cáncer de, lo que se traduce en una tasa de incidencia bruta de 11,3 por cada 100.000 personas, ocupando el lugar número 6 en el ranking de casos nuevos y constituyendo el 4,0% del total de casos nuevos por cánceres. En cuanto a mortalidad, se estima que un total de 1023 personas fallecen por esta causa, lo que se expresa en una tasa de mortalidad bruta de 5,4 por cada 100.000 personas.
Epidemiología
En Chile la mortalidad por cáncer renal ha experimentado un aumento en los últimos años. En el período 2009-2018 de acuerdo con el Ranking de mortalidad según localización del cáncer en hombres, posiciona al cáncer renal con una tasa de 5 muertes por esta causa por cada 100.000 hombres. Con respecto al Ranking de mortalidad según localización del cáncer en mujeres, en período 2009-2018, el cáncer renal se posiciona con una tasa de 2 muertes por 100.000 mujeres.
En este periodo analizado, fue estimado que la tendencia en mortalidad por cáncer renal incrementa en porcentaje inferior a 1% anual, considerando ambos sexos de forma conjunta y de forma independiente.
Acciones focalizadas en la detección precoz Síntomas
El cáncer de riñón es predominantemente silente, siendo solo en el 30% de los casos diagnosticado por síntomas. La hematuria macro o microscópica es el síntoma más común, aunque también se puede presentar con dolor abdominal y edema de extremidades. A menudo el cáncer de riñón se detecta producto de estudios de imágenes solicitados por otras causas. En etapas tempranas, el cáncer de riñón no provoca dolor, por lo tanto, los síntomas de la enfermedad suelen aparecer cuando el tumor crece y comienza a afectar órganos cercanos.
En todas las etapas este tipo de cáncer puede generar productos biológicos activos similares a hormonas o citoquinas, las cuales pueden causar síndromes paraneoplásicos. El examen físico es una herramienta limitada, por lo que siempre se debe evaluar con imágenes una masa abdominal palpable, varicocele de nueva aparición o edema de extremidades inferiores para descartar una neoplasia retroperitoneal.
Las personas con cáncer de riñón pueden experimentar los siguientes signos o síntomas:
- Hematuria (sangre en la orina).
- Dolor o presión en el costado o en la espalda.
- Bulto o aumento de volumen en el costado o la espalda.
- Hinchazón de tobillos y piernas.
- Presión arterial alta.
- Anemia (recuento bajo de glóbulos rojos).
- Fatiga.
- Pérdida de apetito.
- Pérdida de peso.
- Fiebre que no se asocia a infección.
- Varicocele en testículo derecho (desarrollo rápido de un grupo de venas aumentadas de tamaño).
Diagnóstico y tratamiento
Tras estudios de imágenes que sugieran un cáncer renal, además de algunos exámenes generales de sangre y de orina, se solicitan estudios de extensión de la enfermedad (ej. tomografía computada de tórax, abdomen y pelvis) y, en la mayoría de los casos, una biopsia para confirmar el diagnóstico de cáncer; todo esto se hace con el objetivo de definir, junto a otros factores (ej. comorbilidades) el tratamiento más adecuado tras una discusión interdisciplinaria y conversar riesgos y beneficios con la persona afectada y su familia.
El tratamiento utilizado dependerá del estadio del cáncer de riñón, por lo general, en casos de enfermedad localizada, se extirpará el tumor por medio de cirugía; dentro de los procedimientos quirúrgicos posibles están la nefrectomía parcial (extirpación de parte del riñón) y la nefrectomía radical (extirpación del riñón completo). En personas con enfermedad avanzada (con metástasis a distancia) la nefrectomía tiene fines principalmente paliativos (ej. aliviar hematuria), y del punto de vista oncológico predomina el tratamiento sistémico, generalmente con inhibidores de tirosina quinasa antiangiogénicos, inmunoterapia o una combinación de ambas clases de fármacos. La radioterapia puede ser útil para el tratamiento paliativo en ciertas situaciones clínicas (ej. metástasis cerebrales, dolor por metástasis óseas)
Los cuidados paliativos están disponibles durante todo el tratamiento del cáncer, desde el diagnostico hasta el fin de vida, por lo que es posible recibir cuidados paliativos al mismo tiempo que se recibe el tratamiento del cáncer.
Garantías explícitas en Salud
Pueden acceder personas de 15 años y más con diagnóstico o reaparición de cáncer renal, desde la confirmación diagnóstica realizada por un(a) profesional médico(a).
La atención GES cubre diagnóstico y tratamiento, e incluye los siguientes beneficios:
- Medicamentos
- Insumos
- Cirugías
- Exámenes
Si la previsión de salud de la persona es FONASA el diagnóstico y tratamiento se otorgan en Hospitales y Centros de Diagnóstico Terapéutico (CDT)/Centros de Referencia de Salud (CRS).
Si la previsión de salud de la persona es ISAPRE, el diagnóstico y tratamiento se otorgan en clínicas privadas y centros médicos privados específicos, que dependen de cada aseguradora y el plan contratado por la persona.
La garantía de oportunidad en la intervención sanitaria de diagnóstico y tratamientos son los siguientes:
- Etapificación: 45 días desde la confirmación diagnóstica. Tratamiento primario: 30 días desde la indicación médica.
- Tratamiento complementario: 30 días desde la indicación médica.
Prevención
Si bien no existe una forma comprobada de prevenir por completo el cáncer de riñón, se puede reducir el riesgo de padecer cáncer, llevando un estilo de vida saludable, incorporando las siguientes medidas:
- Cese tabáquico.
- Mantener la presión arterial en niveles normales.
- Mantener un peso corporal (IMC en rango normal).
- Aumentar el consumo de frutas y verduras en la dieta.
- Reducir el consumo de grasa en la la dieta.
- Realizar ejercicio físico de forma regular.
Fuente: Ministerio de Salud, Subsecretaría de Salud Pública, División de Prevención y Control de Enfermedades, Depto. Manejo Integral del Cáncer y otros Tumores.