Esto fue lo que le ocurrió a un trabajador que tras ser enviado al teletrabajo por la pandemia, lo despidieron injustificadamente y será indemnizado con 13 millones de pesos.
La persona se desempeñaba como junior administrativo en una sociedad de inversiones y ante la llegada de la pandemia, su empresa barajó la idea del teletrabajo.
Es por esto que dejó de asistir presencialmente desde marzo de 2020. Mientras tanto, la empresa le mantuvo el sueldo, sus gratificaciones y la asignación por movilización. Cabe destacar, que nunca se firmó el anexo del acuerdo y tampoco se especificó sobre la fecha de retorno a la presencialidad.
En octubre de 2020, el contador de la empresa se contactó con él para que hablase con su jefatura sobre la suspensión de su contrato.
Tras esto, se le informó que estaba despedido por ausentarse dos lunes en el mes. Se contactaron el 27 de octubre y el finiquito detallaba que el despido se había hecho el 7 del mismo mes.
El trabajador demandó a la empresa por despido injustificado y se defendió diciendo que cumplió con el teletrabajo. Además, solicitó el cobro de prestaciones laborales, el cual fue acogido y se le dio la razón.
La empresa deberá pagarle poco más de 685 mil pesos de indemnización sustitutiva de aviso previo y casi 7 millones por años de servicios.
Además, 5 millones y medio por recargo del 80% de conformidad a lo establecido en el artículo 168, letra C, del Código del Trabajo.