Una investigación formal se encuentra en curso tras el hallazgo del cadáver de un perro que presentaba signos de desollamiento y decapitación, ocurrido en las cercanías del Balneario Municipal de Antofagasta. La situación fue denunciada por residentes del sector, generando conmoción y rechazo en la comunidad.
Según la información entregada por la Policía de Investigaciones (PDI), el equipo de la Brigada Investigadora de Delitos Contra el Medioambiente y Patrimonio Cultural (Bidema) se trasladó al lugar el domingo 3 de agosto, luego de recibir antecedentes que apuntaban a un grave caso de maltrato animal.
“El hallazgo corresponde a un can que presentaba claras evidencias de mutilación. Nuestros detectives se constituyeron en el sitio y recopilaron información relevante que será entregada al Ministerio Público”, explicó el subprefecto Rodrigo Ortiz.
El material levantado, incluidas declaraciones de testigos y registros audiovisuales, forma parte de las diligencias que buscan esclarecer los hechos y dar con los responsables. La brutalidad del acto ha generado una ola de indignación ciudadana y reabre el debate sobre la protección efectiva de los animales y las sanciones para quienes cometan este tipo de delitos.