En el programa "Salmón en la Patagonia", conducido por Fernando y Gonzalo en Patagonia Radio junto a Infosalmón, se vivió un momento especial: la conversación con Alfonso Muena Rodríguez, uno de los fundadores de la Sociedad de Pesquería y Piscicultura Lago Llanquihue, considerada la primera empresa salmonera de Chile.
A través de su relato, Buena repasó con lujo de detalles cómo hace 51 años, en un contexto político y económico extremadamente incierto, se atrevieron a apostar por un proyecto que parecía casi fantasioso para la época.
Una aventura técnica en medio de la crisis
Buena explicó que la iniciativa comenzó junto a Alfredo Valenzuela, quien en ese entonces era jefe de la piscicultura de Huillinque, mientras él dirigía la oficina de Sercotec en Osorno. Ambos profesionales, con formación en la Universidad Católica de Valparaíso, comenzaron a soñar con cultivar truchas y salmones, especies que por aquel entonces casi no existían en la cultura productiva local.
“Alfredo se enfocó en la parte del cultivo y yo en la nutrición y procesamiento, porque mi especialidad era congelados. Así fuimos armando algo sin mucho respaldo al comienzo, pero con la convicción técnica de que era posible”, relató Muena.
Contó además que presentaron sus proyectos a nivel provincial y nacional, consiguiendo que fueran aprobados por los servicios centrales en Santiago. “Era un proyecto escrito en tres o cuatro papeles, algo muy básico comparado con lo que hoy se exige, pero tuvo luz verde”.
Un proyecto pionero, sin recursos personales
Un dato poco conocido que reveló Muena fue que, dado que eran funcionarios públicos con ingresos modestos, el capital inicial que figura en la escritura incluyó principalmente el valor técnico que ellos mismos aportaban.
“Para la escritura se valorizó nuestro conocimiento técnico. Si no, el Servicio de Impuestos Internos nos estaría persiguiendo hasta el día de hoy porque no teníamos nada: éramos empleados fiscales”, dijo entre risas.
Puerto Montt, el lugar estratégico
Otra clave del éxito fue estratégica: Muena se trasladó desde Osorno a Puerto Montt, porque “ahí se manejaba la plata de la región”, tras la designación del general Soler como intendente. “Puerto Montt se transformó en la capital regional, aquí era donde ‘calentaba el sol’ para los proyectos. Así nos acercamos a los agricultores locales, los mismos que luego se hicieron socios”, agregó.
Recordó con cariño cómo recurrieron a Pesquera Chinquihue, una planta botada, para empezar a experimentar incluso con harina de papa, vinculándose con productores locales para ganar apoyo social y político.
Socios alemanes y apoyo regional
Buena relató que parte importante del proyecto se consolidó con empresarios locales descendientes de colonos alemanes, vinculados a Agro Llanquihue, como los Stolzenbach y Radatz. “De los once socios iniciales, al menos cinco eran de acá mismo, lo que garantizó un fuerte complemento regional”, enfatizó.
¿Eran conscientes del tamaño del hito?
Al cierre, Fernando y Gonzalo le preguntaron si en ese momento imaginaban que estaban colocando la primera piedra de lo que hoy es el principal motor económico de la macrozona sur-austral.
“Para nada, para nosotros era solo un proyecto que veíamos posible y Alfredo siempre decía ‘veo una luz al final del túnel’. Era como criar cocodrilos, nadie nos creía nada. Y todavía no estoy convencido de cómo nos creyeron. Fue un salto al vacío”, confesó.
Incluso relató que en una ocasión le tocó exponer el proyecto directamente ante el propio general Pinochet, en un contexto en que cualquier paso en falso podía costarles la estabilidad laboral y mucho más. “Estábamos dispuestos a jugarnos el pellejo, porque en ese tiempo el único empleo seguro era el fiscal, no había industria ni empresa privada”.
Un homenaje pendiente
Finalmente, el programa cerró destacando que este hito pasó “sin pena ni gloria” al cumplirse el año pasado sus 50 años. Muena coincidió en que es hora de dar visibilidad a este origen, pues sentó las bases para que la industria salmonera —hoy con miles de empleos directos e indirectos— sea el pilar económico del sur de Chile.